Martha Estela Torres Torres es una escritora de Chihuahua, México. Es autora de los poemarios ‘Hojas de Magnolia’ y Arrecifes de sal, y  del libro de breves ensayos ‘Pasión Literaria’. Novelas ‘La ciudad de los siete puentes’ y ‘Cinco damas y un alfil’. Recientemente presentó su nuevo libro, una recopilación de 48 cuentos que se titula ‘Árboles en mi memoria’ y un plaquette de poesía titulado: “La cólera del aire” que escribió en homenaje al centenario del escritor mexicano Juan Rulfo.

1— Nos dicen que empezaste a escribir desde temprana edad, ¿nos puedes hablar de esto?

Desde sexto de primaria supe que podía escribir porque hice un trabajo en la escuela que enviaron a Guadalajara y me dijeron las religiosas que mi composición había ganado entre alumnas de varios institutos, fue en la congregación de Siervas de Jesús Sacramentado, pero en ese tiempo solo escribía para mí, para mis amigas y no podía mostrarlos a los demás.

 Mi mamá los empezó a guardar porque estaban en hojas sueltas y después fui escribiendo en una agenda, pero un día la presté a una amiga para que leyera mis trabajos y nunca me la devolvió. 

Después no sentí que tenía importancia escribir y desistí algún tiempo hasta que empecé a asistir a talleres literarios en 1995 donde los coordinadores empezaron a motivarme y a orientar mi escritura, los que creyeron en mí, como el arquitecto Mario Arras, mi paisano José Vicente Anaya y Roberto Ransom a quienes les debo muchísimo, pero hasta el 2000 participé en concursos de publicaciones de la Secretaría de Cultura y me apoyaron con la edición de dos de mis libros: Hojas de Magnolia y Pasión Literaria. Y luego fueron saliendo otros. 

2— Escribes poesía y novelas, ¿en cuál género piensas que te sientes mejor?

 Bueno, yo inicié con poesía y siento que tengo sensibilidad para este género, pero la escribo con mucha lentitud es cuestión de inspiración y sentimiento además voy alternando con mis oficios de maestra y de editora. 

La novela es un campo que me gusta mucho experimentar, claro que requiere más tiempo y es más laboriosa. Hay que estar pendiente y darle seguimiento, pero te atrapa, te obliga a estar pendiente de ella para avanzar, inventar, reinventar, corregir, y concluir finalmente. Me entusiasmo mucho en el trabajo narrativo.

3— Recientemente publicastes un libro de cuentos ‘Arboles de mi memoria’, ¿qué nos puede decir?

Es una selección de relatos y cuentos que fui reuniendo durante ocho años. Estructurados en tres apartados, el primero es de tema lúdico, cotidiano que pretende ser gracioso, el segundo apartado contiene relatos un poco dramáticos donde aparecen conflictos y finales inesperados. También de tinte y crítica social, el trabajo tan arduo y poco remunerativo del campo, el salario del maestro y las  penurias del artista. Y en la última sección son relatos y cuentos que llevan a dimensiones desconocidas. Aparece trasgresión de la realidad, locura y obsesiones. Incluyo también el tratamiento del absurdo.

4— Si tuvieras que salir para un largo viaje, y solo pudieras llevar dos o tres libros,  ¿cuáles serían? 

Si fueran de escritores de otro país: Los pasos perdidos de Alejo Carpentier, Cuentos Orientales de Margarite Youcenar y Los heraldos negros de César Vallejo.

Si fueran mexicanos El llano en llamas de Juan Rulfo, Águila y sol de Octavio Paz, y Primero sueño de Sor Juana Inés de la Cruz.   

5— ¿Qué opinas de la literatura latinoamericana de hoy cuando solo queda vivo ya un solo escritor de aquel Boom?

Lamentablemente solo nos queda Vargas Llosa además Nobel de doble nacionalidad. Pues creo que aún suspiramos por aquellos escritores que nos motivaron tanto, pero hay escritores  importantes e interesantes surgiendo, aunque lamento saber lo que afirma César Aira, quien es un escritor argentino con cien obras en su haber. Dice que ya no hay tan buenos escritores como antes, se refiere obviamente al Boom. Dice que no solo la literatura latinoamericana sino la hispanoamericana está muy floja. Que ya no encuentra de primer nivel como la generación de los 60s. También se refiere a la designación del Nobel que se otorgó a la música.  

6— Eres una escritora que abarcas diversos géneros, pero cuáles son tus proyectos futuros?

Mis proyectos son simplemente escribir, si acaso continuar  combinando poesía que surge de mi alta sensibilidad que por cierto algunos cuestionan y por supuesto la narrativa ya sea novela o cuento que me permite inventar o recrear realidades, distintos universos. 

Mi proyecto actual es terminar una novela titulada La revelación del agua que está en proceso de revisión, se basa en un acontecimiento verídico en la primera parte y en la segunda ficcionalización sobre  la inundación de mi ciudad natal: Parral Chihuahua en 2008.

Y a largo plazo pues iré reuniendo poco a poco la poesía que va surgiendo cuando la inspiración y la nostalgia me embargan. 

Siempre pospongo mucho la publicación de mi trabajo porque después de concluido entro en un proceso de paciencia ya que no es fácil encontrar apoyos para publicar. Ese es mi mayor incertidumbre.  

Participar en concursos es como he conseguido la edición de mis libros con respaldos que desafortunadamente tardan mucho tiempo en concretarse.  Ojalá pudiera obtener oportunidades con editoriales particulares con mayor difusión. 

Ismael, agradezco muchísimo tu interés en mi trabajo, es lo que me alienta cada día para perseverar y tratar de mejorar mi escritura. Un abrazo desde Parral, la capital del mundo.