El sector del libro en España crece por décimo año consecutivo y se convierte en el principal exportador de la UE

La Federación de Gremios de Editores anticipa en un informe los datos de 2022, que evidencian un incremento de las ventas y una aceleración de las exportaciones con respecto a 2019

El sector editorial español mantuvo en 2022 su ritmo de crecimiento tras una década de subidas. Así se refleja en el avance del Informe de Comercio Interior del Libro que la Federación de Gremios de Editores de España ha presentado este martes.

"2022 ha sido un buen año para el sector. Tanto este informe como el Barómetro de Hábitos de Lectura confirman que existe interés por ellos, lo que es una buena noticia, ya que el libro constituye una herramienta cultural con una gran importancia para nuestro desarrollo como país. Debemos seguir trabajando para mantener esta línea de crecimiento y sortear las situaciones de incertidumbre que puedan producirse", explicó Daniel Fernández, presidente de la Federación de Gremios de Editores de España (FGE). "Las estadísticas demuestran que las sociedades con un mayor índice intelectual son aquellas que más progresan a nivel económico, espiritual y democrático, y España se encuentra ahora mismo en un lugar privilegiado dentro de la Unión Europea", afirmó.

ESPAÑA, PRINCIPAL EXPORTADOR DE LA UNIÓN EUROPEA

Tras dos años en el que las cifras de comercio exterior cayeron como consecuencia de la pandemia y las restricciones para la movilidad de personas y mercancías, en el año 2022 comenzó la recuperación de las exportaciones, especialmente en el sector gráfico. En 2022, el sector del libro registró un incremento del 1%, alcanzando los 348,50 millones de euros. Más llamativo es el dato de las novelas gráficas, cuyas ventas en el extranjero han aumentado cerca de un 25%.

Según indica la FGE, la industria literaria española es hoy la principal exportadora de la Unión Europea. Hasta 2020 esta posición hegemónica correspondía a Reino Unido pero, al formalizarse el Brexit, España pasó a ocupar el primer puesto superando a países vecinos como Francia o Alemania.

Al margen de su penetración en el continente europeo, Iberoamérica constituye el área geográfica que recibe un mayor número de obras españolas, debido al idioma común y los vínculos editoriales que se establecen en cuanto a venta de derechos en las distintas ferias del libro latinoamericanas. Los libros exportados a México y Argentina, los mayores destinatarios, representan un valor de 182,43 millones de euros frente a los 146,302 millones de ingresos dentro de la UE.

El sector editorial español mantuvo en 2022 su ritmo de crecimiento tras una década de subidas. Así se refleja en el avance del Informe de Comercio Interior del Libro que la Federación de Gremios de Editores de España ha presentado este martes.

"2022 ha sido un buen año para el sector. Tanto este informe como el Barómetro de Hábitos de Lectura confirman que existe interés por ellos, lo que es una buena noticia, ya que el libro constituye una herramienta cultural con una gran importancia para nuestro desarrollo como país. Debemos seguir trabajando para mantener esta línea de crecimiento y sortear las situaciones de incertidumbre que puedan producirse", explicó Daniel Fernández, presidente de la Federación de Gremios de Editores de España (FGE). "Las estadísticas demuestran que las sociedades con un mayor índice intelectual son aquellas que más progresan a nivel económico, espiritual y democrático, y España se encuentra ahora mismo en un lugar privilegiado dentro de la Unión Europea", afirmó.

En 2022, la producción editorial superó los 83.000 títulos editados(un 68% de obras en papel y el 32% restante únicamente en formato digital). Esto supuso una facturación que alcanzó los 2.718,52 millones de euros, cifra que representa un incremento del 5,5% respecto al ejercicio de 2021. Con relación a 2019, el sector ha acumulado un crecimiento de la facturación del 11%.

"La industria del libro es la gran industria cultural contribuyente de nuestro país", señaló el presidente de la FGE. Destaca el dato de que el principal canal de comercialización siguen siendo las librerías de barrio y las cadenas de librerías (53,9%), pese al auge de las plataformas digitales que auguraban un futuro apocalíptico para estos establecimientos.

Del informe se desprende, además, que todos los subsectores del libro incrementaron sus ventas en 2022. Destacan especialmente las obras de literatura infantil y juvenil, que crecieron un 8,6%, y los de ficción para adultos, que lo hicieron un 8,5%. Desde 2019, los libros de temática infantil y juvenil han duplicado su facturación. "La pandemia aumentó los índices de lectura durante el confinamiento, pero en el caso de los libros para el público juvenil es espectacular, de más del 50%", destacó Fernández. "Hay más editoriales que han entrado en este rubro, tenemos excepcionales autores e ilustradores que crean obras estupendas, y best sellers como Harry Potter abrieron el camino hace años para los lectores más jóvenes".

Fernández señalaba que el hecho de que la población española siga decantándose por la lectura como opción de ocio frente a la abundante oferta de series y películas de las plataformas "es una buena noticia para el sector". Pese a los resultados que anticipa el informe, las ventas de libros continúan representando únicamente el 5% del mercado, debido a la piratería y a la difusión ilegal de contenidos a través de redes sociales, un asunto aún por regular.