'La voz de Pasolini', reflexiones de un ensayista de cine

En una época en la que el concepto de 'cine de autor' no había sido acuñado, un grande de la escena se erigió como ensayista de cine, casi sin quererlo. Pasolini, dejó un legado de documentos y grabaciones sobre dos de sus obras fundamentales y que ahora recoge una exposición en la Fundación Luis Seoane, de A Coruña.

'La Voz de Pasolini. Primeros apuntes de un ensayista' aborda la faceta más desconocida de su universo, la de realizador dentro del ensayo cinematográfico. Lo hace a través de guiones originales, fotografías de rodaje o grabaciones en las que reflexiona sobre su trabajo. Buena parte de este material es inédito y proviene de la colección del historiador Carlo di Carlo y del fondo 'Pier Paolo Pasolini', de la Cineteca de Bolonia.

Dos son las películas del genio italiano que centran la muestra, 'Mamma Roma' y 'La Rabia'. El guión de la primera iba acompañado de una transcripción sonora cuya publicación conoció José Manuel Mouriño, comisario de la muestra. Cuando los escuchó por primera vez descubrió a un Pasolini "preocupado por su propia obra y reflexivo". La conjugación de estos archivos con el resto de material fue el germen de la exposición.

Independientemente del grado de conocimiento sobre el cineasta, lo que se encuentra el espectador es "una suerte de 'making off', de su obra además de un ejercicio excepcional de ensayismo cinematográfico", asegura Mouriño al describir el proyecto.

Un 'corpus' con material inédito

El eje central son los diarios de trabajo y narraciones del cineasta durante el rodaje de 'Mamma Roma', en 1962. A través de su voz, el espectador accede a cabinas en las que se puede seguir la grabación completa subtitulada en castellano. Estos diarios de rodaje conservados por Carlo di Carlo, ayudante de rodaje de Pasolini, no habían tenido hasta la fecha una difusión semejante.

Pero, además, en la muestra se pueden ver 90 fotografías realizadas por Angelo Novi pertenecientes a la filmación de 'Mamma Roma', de las que 50 nunca habían sido expuestas antes. Dibujos, esquemas de rodaje y correcciones del propio autor completan este 'corpus' sobre la obra pasoliniana. Sobre 'Mamma Roma', el comisario destaca una anécdota: el espectador puede ver una discusión entre Pasolini y la protagonista del film; la fiereza de Anna Magnani contrasta con la dulzura del director que finalmente le hace entender lo que exigía de su interpretación en la película.

El guión original de 'La Rabia', de 1963, constituye la otra parada de este viaje. Además de indicaciones personales del propio Pasolini de su puño y letra, se exhibe también un fragmento de la película reconstruido por la filmoteca de Bolonia en 2008, además de abundante material. Para completar 'La Voz de Pasolini' se ha incluido un apéndice de fotografías de otras películas en el set de rodaje, como 'El Evangelio según San Mateo' o 'Teorema'.

Reflexión profunda sobre su trabajo

El carácter ensayístico de estos diarios de rodaje les da un valor añadido como objeto de estudio de la obra de Pasolini. Pionero en descubrir nuevas formas de montaje cinematográfico, cercano a lo poético y personal, el italiano se reconoce como "exégeta de su propia obra" a través de los archivos sonoros, según el comisario de la muestra. "Es una forma de trabajar que se repite en otras de sus piezas de apuntes sobre la historia de África o Palestina", reitera.

En estas anotaciones al margen, que conforman el proyecto, el director se preocupa por desgranar las atmósferas en las que trabaja. Esos ambientes eran, según el comisario, "muy importantes" para Pasolini, especialmente el sol. De ahí que, cuando estaba cubierto, se retirase a meditar al igual que los grandes pensadores. Mouriño recuerda que ese "malestar pasoliniano" es una constante de esta muestra y de su obra literaria en general. Los archivos incluyen también reflexiones sobre su primera película 'Acattone', o sobre su actor fetiche, Franco Citti. En definitiva, 'La voz de Pasolini' y su legado audiovisual constituye un signo de vanguardia cinematográfica y un abordaje de la figura del autor como teórico fundamental de la imagen.

La muestra realizada en colaboración con el Instituto Italiano de Cultura de Madrid, la Cineteca de Bolonia y el Archivo Carlo di Carlo, tiene una gran vocación de continuidad y, según su comisario, ya están en conversaciones con algunos centros para su movilidad.

Por el momento, se puede disfrutar hasta el próximo 10 de abril en la Fundación Luis Seoane, de A Coruña, calle San Francisco s/n.