LIBRA Y ESCORPION    Autor: Luis Medina U.                                                                                                                                                                                                             
Medum, milenario contemplador del  firmamento apreciaba junto a sus amigos, los nomos, las maravillosas constelaciones, que cual collar se desplazaban por el cielo azul, fijándose un nomo en la proximidad de libra con escorpión, pregunto ¿sabio amigo que nos puedes contar sobre esas dos constelaciones?, Medum respondió, no sé si sea verdad o mentira, pero lo que escuche hace incontables edades es lo que voy a relataros, era un atardecer de esos en que las golondrinas vuelan sin cesar y el perfume de las lilas se confunde con el aroma de las yerbas silvestres, bajaba por estos  parajes un escorpión mirando aquí o allá para encontrar algo que comer, cuando diviso un pequeño bulto que despedía una luz que se apagaba lentamente, lo miro más de cerca comprobando que era un Hada muy hermosa herida de muerte, su corazón sangraba profusamente algún monstro se lo habría herido y ella tuvo la suficiente fuerza para alejarse de él y caer extenuada en ese lugar, desesperado no sabiendo que hacer ante el sufrimiento de aquella fuente de luz, que instintivamente clavo su aguijón en la pequeña hada, esta se estremeció de dolor ante tal ataque, el dolor se hiso más intenso dentro de ella, algo sucedía que convulsionaba sus entrañas, su cuerpo respondió rechazando el veneno de tal forma que su efecto en su sistema inmunológico lograra el comienzo de la reparación de todas sus heridas, su corazón dañado recobro la lozanía, el escorpión la contemplaba sin emitir palabra paso la noche y el otro día, escorpión le trajo alimento y durante siete días cuido de ella, ya recuperada viéndola feliz y pudiéndose desplazar por los aires como la brisa del viento, ella agradeció a su amigo escorpión por los cuidados que le procuro y por esa preciada gotita de veneno que fue para ella el tónico que salvo su vida, le pregunto Libra que era el nombre del hada, ¿ qué querrías a cambio de tus favores?, escorpión que no era muy dado a hablar pronuncio estas palabras, mi querida hada en mi corazón nunca había nacido algo tan hermoso como lo que tú me has proporcionado, he conocido en ti el Amor, mi naturaleza me impide amar, soy de esos  que llegado el momento clavo el aguijón en lo más profundo de mi ser autoeliminandome, por eso este sentimiento de amor es algo que no comprendo, yo un escorpión y tu un hada que podemos hacer, aunque a mí me gustaría estar toda mi vida contigo no sería posible, el hada conmovida le dijo amigo mi amor es tan grande que envuelve a todos los seres del universo, hasta a este monstro que casi me mata y he sentido por ti algo tan grande que no me imagine sentir, también me gustaría que estuviéramos juntos, mas ahora en estos cuerpos que poseemos no es posible, quizás en el futuro cuando nuestras almas lleguen a un estado de perfección nos podremos encontrar y vivir juntos por siempre, mas como símbolo de nuestro acuerdo trazare en las estrellas un compromiso y en el cielo aparecieron dos nuevas constelaciones una al lado de la otra Libra y Escorpión. Y desde ese momento el firmamento muestra esa promesa de Amor entre Libra y Escorpión hasta el fin de los tiempos, Medum quedo en silencio como presintiendo que esas dos almas estarían en un futuro muy cerca y  se reconocerían la una a la otra. Fin