Italia, donde tenían a Berlusconi, un primer ministro que enviaba al campo a sus delegados en busca de niñitas, ahora un párroco italiano ha desatado una fuerte polémica donde culpa a mujeres de incitar a ser violadas
Grupos de mujeres han pedido su destitución tras colocar en el tablón informativo de su iglesia una carta en la que acusa a las mujeres de haberse alejado de la virtud y de ser en parte culpables de la violencia machista, de habérselo buscado
Se trata de Piero Corsi, párroco de "San Terenzo", de Lerici, en la provincia de La Spezia (noroeste), que ha colocado un cartel en el portón de la iglesia, titulado "Donne e il femminicidio" (Mujeres y Uxoricidio"), en el que pretender hacer una "sana crítica" y señala que muchas veces "una prensa fanática y desviada" echa la culpa de todo al hombre.
El cura se pregunta si es posible que de una "sola tacada todos" los hombres hayan enloquecido y dice que "no", que no lo cree, que el problema está en el hecho de que las mujeres "cada vez más, provocan, se vuelven arrogantes y se creen autosuficientes y acaban por exasperar las tensiones".
"Niños abandonados, casas sucias, comidas frías, compradas en tiendas de comidas rápidas, ropas mugrientas... Si una familia acaba en el desastre y se llega al delito, una forma de violencia que hay que condenar y castigar con firmeza, muchas veces la responsabilidad es compartida", escribió.
El sacerdote agregó: "¡Cuántas veces vemos a muchachas y señoras maduras caminar por la calle con vestidos provocadores y ceñidos! ¡Cuántas traiciones se consuman en los lugares de trabajo, en los gimnasios y los cines! Podrían evitarse, ya que desatan los peores instintos y después se llega a la violencia o al abuso sexual".
El texto, colocado en estos días de Navidad y que aún sigue colgado, según la prensa local, levantó inmediatamente las protestas de los parroquianos y ha puesto en pie de guerra a asociaciones de mujeres, como "Teléfono rosa", que han escrito incluso al primer ministro, Mario Monti, pidiendo que sea destituido de ese cargo, y han denunciado que "instiga a la violencia contra ellas".
Carnieri Moscatelli agregó que el mensaje "instiga a la violencia contra la mujer porque ofrece inauditos motivos para actos criminales como esos" y pidió la intervención de Monti, del papa y del obispo de la Spezia. Según datos del "Teléfono Rosa", una mujer es asesinada en Italia cada dos días y en estas circunstancias han muerto 98 en lo que va del año 2012.