El conflicto estratégico subyacente  que domina al planeta hoy en día se expresa en la amenaza de Guerra generalizada, hambruna y enfermedades epidémicas que nace, en última instancia y casi enteramente, de los varios intentos de emplear el modelo de la Roma imperial pagana y la ética romana pagana  o una aún más bárbara, con el propósito de establecer un ‘’gobierno mundial’ por medio de la Organización de las Naciones Unidas o de algún instrumento alternativo. Hoy, como en los tiempos de los malvados Tiberio, Nerón, Calígula y Diocleciano, el obstáculo principal a la consolidación de ese ‘’nuevo orden mundial’’ perverso es la fuerza del cristianismo. (Fuente: La Ciencia de la Economía Cristiana, pág. 4 y 5 por Lyndon H. La Rouche, Jr. 1993).

Es por cuanto de que, el cristianismo es una de las tres religiones monoteístas que existen en el mundo hoy en día. La cual tiene como base y fundamento las enseñanzas de Cristo.

El cristianismo primitivo nace como una corriente de la religión judaica en el año I a. de C., con el nacimiento de Jesús de Nazareth en Judea (actualmente Israel). (Fuente: Internet.).

Por ser  como siempre ha sido, El cristianismo es actualmente una de las religiones más difundidas en el mundo llegando a más de dos billones de seguidores en el año 2015. Los mayores grupos cristianos se dividen en:

La Iglesia Católica Romana, cuyos creyentes se llaman católicos.

La Iglesia Ortodoxa o Iglesia de Oriente o Iglesia Ortodoxa Griega.

La Iglesia Protestante, cuyos seguidores se llaman protestantes.

Por su historia y origen, el cristianismo deriva de la corriente religiosa judaica en el año I a. de C., y es basada en la vida, las enseñanzas y la muerte de Jesús. Los judíos no creen en Jesús como mesías o persona divina.

La resurrección de Jesús y su divinidad será uno de los puntos a ser discutidos por las autoridades del cristianismo que generara posteriormente su división.

El cristianismo tiene como libro sagrado la Biblia, compuesta por el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento. Las enseñanzas de Nuevo Testamento son casi exclusivas de la religión cristiana. (Fuente. Internet).

El cristianismo medieval tenía varias corrientes, especialmente por la diferencia de opiniones sobre la divinidad,  resurrección de Jesús y la existencia de la Santísima Trinidad.

En el año 313 d. de C., el emperador Constantino I promulga el edicto de Milán, en la cual se establecía finalmente la libertad de culto,  acabando con las persecuciones contra los cristianos.

Esta ha sido una amenaza continua lo largo de la historia  europea moderna, en particular desde los tiempos del malvado primer duque de Marlborough y sus compinches del ‘’Partido Veneciano’’, a principios del siglo XVIII. Eliminar la moralidad cristiana para sustituirla con la ética amoral de una variedad de paganos, como los liberales británicos y los románticos en general, ha sido rasgo característico de las pretendidas restauraciones del imperio mundial romano pagano, como la Pax Británica, el bonapartismo o los sórdidos sueños de la Tercera Roma, de Dostoievski y Hitler. (Ob.c. p. 5)

Inevitablemente, las campañas a favor de una forma imperialista pagana de gobierno mundial –o unimundista- aparecieron a menudo como intentos manifiestos de erradicar al cristianismo y siempre como la preferencia explicita de alguna forma de ética pagana secular frente a la moralidad cristiana. La obra de personajes como: Francis Bacon, Thomas Hobbes, John Locke, David Hume, Voltaire y Adam Smith ejemplifica ese impuso paganizante. A esta secta pagana unimundista se la llama también la ‘’Nueva Era’’. En rigor, el paganizante Francis Bacon  ya era partidario de la Nueva Era, al igual que los compinches y seguidores de Marlbjorough entre los liberales británicos del siglo XVIII y los compinches y seguidores de Montesquieu, Voltaire, etc., entre los románticos de habla francesa. En nuestros días, lo común es que eso de la ‘’Nueva Era ‘’ se refiera a quienes, empezando por John Ruskin de Oxford, por ejemplo, se adhieren a la consigna astrológica  de los autoproclamados Anticristos Friedrich Nietzsche y Aleister Crowley: dar fin a la Era de la Razón (Sócrates, Jesucristo) y dar paso a la Era de Acuario (Dionisio-Apolo, Lucifer-Lucís, Satanás).