Teniendo en cuenta que el universo se expande todo en sí; al universo no le queda más remedio que ser un universo cerrado, ya que si fuese un universo abierto, o infinito, no podría expandirse, porque esa infinitud le impediría poseer límites expansivos. Con lo cual, inevitablemente el universo tiene que ser cerrado.
Pero sin embargo, un universo cerrado tampoco podría expandirse, ¿porque, dónde se expandiría?: Dentro de otro universo no podría expandirse, puesto que un universo en el mismo universo es un único universo. Entonces sólo podría expandirse en la nada, con lo cual tampoco podría expandirse, ya que la nada no existe. Por consiguiente , la única posibilidad que le queda al universo es la de expandirse dentro de sí mismo, dentro de su infinita pequeñez como universo infinitamente pequeño.
De la única forma que el universo podría expandirse y crecer sin cesar dentro de un infinito pequeño espacio, es siendo un universo totalmente dinámico. Y eso es posible porque la existencia no es existencia real, es existencia en movimiento; la cual en el mismo instante que dejase de moverse se transformaría en la nada, puesto que la existencia en movimiento es la nada en movimiento. Y es que no existe otra clase de existencia que la existencia en movimiento.
No importa repetirlo otra vez más, por mucho que se acumule de existencia en movimiento un espacio, ese espacio no se engrandece, sólo se puede engrandecer de movimiento, lo cual no es un engrandecimiento real, es engrandecimiento dinámico. Nuestro universo es un universo enorme, pero su enormidad es absoluto movimiento, lo cual no es grandeza real es grandeza en movimiento. Por eso nuestro universo no es grande, es sólo un universo expansivo dentro de un infinito pequeño espacio dinámico; ya que la existencia que posee nuestro universo no es existencia real, sino existencia en movimiento.
Ninguna de esas infinitas pequeñas partículas que saturan contantemente de movimiento al universo podrían dejar de moverse, ya que si dejasen de moverse se transformarían en la nada. Esas infinitas pequeñas partículas son las más pequeñas que existen. Son indetectables porque son lo más cercano a la nada que existe, son las esencias de la nada en movimiento. Cómo se podría detectar a la nada, a lo que no existe; tal vez, microscópicamente, sólo se podrían detectar los movimientos de esas partículas.
El universo surgió como infinita pequeñez en movimiento y de esa pequeñez en movimiento surgieron infinidades de pequeñeces en movimiento semejantes entre sí, que no podían engrandecer al universo como grandeza real, ya que fuera estaba la nada y en donde no existe nada, nada se puede engrandecer. Por consiguiente a esas pequeñeces en movimiento no le quedaban más remedio que atraerse entre sí, ya que no podían repelerse hacia fuera porque lo de fuera no existía, era la nada. De esa manera, el universo se engrandecía sin cesar, pero no como grandeza, sino como acumulación de movimientos dentro de un infinito pequeño espacio dinámico. De esa manera, el universo se mueve dentro de sí mismo expandiéndose a todo su alrededor, va creciendo ficticiamente a todo a su alrededor, puesto que no cesa de saturarse mediante la multiplicación constante de esas partículas en movimiento. De esa manera, el universo será cada vez más grande y adquirirá cada vez mayor dinamismo; pero por mucho que crezca, siempre se mantendrá en su infinito pequeño espacio dinámico, ya que ese crecimiento no es real, es crecimiento dinámico.

Autor: Salvador Sánchez Melgar
Registrado en Safe Creative el 11/03/2012
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